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Poker a beneficio de los afectados por la DANA en España
El torneo BAP de Sevilla destinará parte de lo recaudado a las víctimas del desastre natural que afecta a gran parte de la población española.
En medio de la buena racha que vienen registrando los grinders colombianos en los paños virtuales, uno de los puntos más altos en lo que va de noviembre fue protagonizado por el cartagenero Skandar José Yunes , con su reciente triunfo en el Big $8,80 de PokerStars. Haber superado un field de más de 4.700 contendientes y quedarse así con un cobro que sobrepasó los 5 mil dólares, gracias a un deal sellado mientras se jugaba el heads up del torneo, no fue un logro casual para Yunes. El caribeño consiguió la cima de este exigente certamen gracias a un juicioso proceso de formación en esta disciplina mental, como lo detalló en una amplia charla con CodigoPoker que publicamos confiados en que puede convertirse en un importante referente para quienes dan sus primeros pasos en las competencias online.
Al preguntarle por sus inicios en el juego ciencia del siglo XXI, Skandar no se ahorró detalles en su relato: “Conocí el poker hace un año, gracias a algunos amigos. Como todo principiante, no sabía qué era un flop, un turn o un river, ni conocía bien el ranking de manos. Empecé haciendo verdaderos desastres en las mesas. Salía de los torneos en la primera mano. Arriesgaba todas mis fichas con cualquier par de la mesa y no tenía en cuenta todos los factores y aspectos que se necesitan para llegar a ser ganador”, confiesa el grinder.
Ese contacto con el poker en partidas caseras, en las que veía jugar a sus amigos, motivó a Yunes a estudiar el juego y pronto optó por acercarse a la práctica en línea: “Empecé jugando torneos sit & go de 0.50 dólares y luego pasé a los multimesas, donde encontré mucha más emoción. Me acostumbré a leer toda clase de información sobre poker que encontrara en Internet, pero pensé que faltaba algo importante en mi proceso, que sería el acompañamiento por parte de un jugador experimentado y reconocido”, avanza Skandar con su historia.
En su búsqueda de un guía que lo orientara para mejorar su nivel, el grinder, de ascendencia turca, encontraría una de las sorpresas que mejor pudo iluminar sus inicios en los paños: “A través de las redes de jugadores fui consultando nombres destacados, tanto nacionales como del exterior. Le pregunté a varios si podían ayudarme con clases, preparación y revisión de mi juego, pero algunos no contaban con tiempo para hacerlo o simplemente no ofrecían coach. A medida que seguía buscando, también fui aprendiendo por mí mismo y empecé a notar avances que me motivaron mucho. Logré ganar mi primer torneo, un $1.10 6-max con niveles de 15 minutos. Poco después, a través de Johann Ibáñez , pude contactar a Daniel Hurtado y llegamos a un acuerdo para que se convirtiera en mi coach. Daniel no dudó en brindarme todo su apoyo y conocimiento: revisaba mi juego, compartía sesiones conmigo y así pude ir aprendiendo y desarrollando mejor mi poker”, cuenta Yunes como volviendo a vivirlo.
Esta asesoría se intensificó cuando el cartagenero pudo visitar Medellín , donde reside su coach: “Daniel me abrió su casa para que presenciara sus sesiones y eso me permitió seguir jugando con mayor conocimiento y habilidad. Recuerdo que poco después conseguí mi primer gran resultado y no podía creerlo: el 1º de diciembre de 2014 fui segundo en el Hot $7,50 de PokerStars, en el que me quedé con un premio de 3.700 dólares, algo que me hizo sentir que mi sueño empezaba a hacerse realidad”, describe Skandar con una sinceridad que contagia.
Pero esa especie de encuentro premonitorio con sus sueños puso a Yunes ante un dilema que ya resulta habitual en los relatos de diferentes grinders respecto a la forma en que se encaminaron a optar por el poker como oficio: “Soy administrador de empresas y especialista de la Universidad de Cartagena , pero decidí darme una oportunidad con el poker. Hablé con mis padres y traté de convencerlos respecto a mi proyecto. Aunque al principio no fue fácil, seguí trabajando duro a lo largo de este 2015. Fue un año complicado porque los cobros no aparecieron con mucha frecuencia, pero me llené de paciencia, convencido de que convertirse en ganador no es algo que suceda de la noche a la mañana, sino todo un proceso, y mucho más en un deporte tan complejo como el poker”, continuó Skandar.
Esa fortaleza mental mantuvo al cartagenero en proyección hacia el gran éxito que le llegó esta semana, como lo referimos en las primeras líneas de este perfil: “Había tenido varios cobros que me ayudaron a mantener mi banca y seguía trabajando con disciplina. Daniel (Hurtado) me ayudaba con frecuentes revisiones de mi juego y eso me permitió corregir muchos errores que estaba teniendo. Traté de no desmotivarme, por más que las cosas vinieran siendo costosas. Siempre jugaba con la mayor disciplina y controlando los momentos de tilt, algo que para mí ha sido muy difícil. Varias veces avancé bastante en los Big $8,80 y $5,50, pero no alcanzaba a concretar el objetivo. Hace unos pocos días, justo una semana después de mis últimas sesiones de coach con Daniel, hice un torneo perfecto y pude quedarme con el mejor cobro de mi carrera en el Big de los 8 dólares”, precisó Yunes.
Al pedirle algunos detalles de este importante triunfo, Skandar hizo un amplio inventario que dio cuenta de las arduas horas de lucha que su proeza implicó: “En las primeras fases del torneo logré estar muy cómodo, después de doblarme en la cuarta mano, gracias a un par de jotas con el que hice set para despojar de todas las fichas al rival. De ahí en adelante pude esperar los mejores spots. Alcancé los cobros cuando quedábamos 630 jugadores y seguí runneando con buenas cartas. Así gané pots que mantuvieron mi stack saludable y no tuve problemas para estar entre los 100 últimos sobrevivientes del field”.
“Otra situación determinante llegó cuando quedábamos 30 jugadores -prosiguió Yunes-. Yo estaba en el top 10 y recibí pareja de sietes en la ciega mayor. El jugador en CO abrió y el BTN cubrió su apuesta, a lo que el SB respondió shoveando. Analicé la dinámica de la mesa y al considerar que el último agresor venía atacando de una manera algo desesperada, después de haber perdido casi la mitad de su stack algunas manos atrás, tomé la decisión de jugar all in para aislar a los otros dos rivales, como efectivamente ocurrió. El agresor enseñó A5, así que acerté al pensar que debía tener un rango muy débil. Desafortunadamente no tuve suerte y un As en el river le dio la mano al rival. Aunque llegué a estar bastante abajo en el chipcount, mantuve la calma y la confianza en mí mismo, convencido de que esta vez las cosas se iban a dar. Mi stack se redujo a solo 6 ciegas y recibí un KJ con el que decidí shovear en SB, después de que el BTN abriera con un min-raise. El jugador del BB también jugó all in, aislando al agresor inicial. Fue un spot muy incómodo, pues el oponente mostró AK. La varianza estuvo a mi favor esta vez y el flop trajo la J que me permitió quedarme con ese gran pozo y seguir avanzando”.
“Luego recibí un par de manos premium y jugué otras buenas cartas para acumular fichas y volver al top 10, cuando ya solo quedábamos 18 en el torneo. Empecé a ser más agresivo y a poner presión, pero sin perder el respeto por los rivales. Cuando estábamos en burbuja para la mesa final, alcancé el liderato y así me mantuve hasta el 5-handed, donde pasé a ser el último de los que seguíamos activos. Traté de jugar un poco más tight, a la espera del mejor spot para doblarme. Las cosas se fueron dando y volví a ser chipleader al llegar al 3-handed y al momento del heads up entré 2 a 1 a favor. Ahí se llegó al deal que me favoreció y pude celebrar después de haber jugado enfocado durante más de 9 horas, sin perder la paciencia y aplicando todo mi conocimiento”.
Tras su detallado relato, pasamos a hablar de sus aspiraciones para el futuro cercano, frente a lo que Skandar manifestó: “Quiero seguir trabajando con mucha disciplina, porque he aprendido que con constancia y perseverancia, los resultados llegan. Estoy muy feliz y motivado a seguir luchando por mejores cobros. Quiero continuar aprendiendo, conocer a otros grandes jugadores y ser humilde, pues considero que esa debe ser una característica importante de todo jugador de poker si quiere llegar lejos”, anotó con mesura el novel campeón.
Ya sobre el cierre de esta conversación, Yunes aprovechó para recordar en este triunfo a aquellos que han acompañado su proceso: “Mi primer agradecimiento es para mi coach Daniel Hurtado , por todo el apoyo que me ha brindado en este proceso de aprendizaje y por los consejos que pude recordar mientras jugaba la mesa final. Daniel me ha transmitido mucha confianza en mí y en mis capacidades y yo también he podido verlo como un jugador muy completo, al que le deseo grandes éxitos en su carrera. También aprovecho para saludar a mi paisano Dixon Palacios , a Raúl Fonseca y a Martín Romero , quienes han sido otra gran ayuda durante mi proceso de formación como jugador de poker. Mis primeros pasos fueron a su lado y ahora ya podemos compartir manos, debatirlas y compartir conocimientos juntos, gracias a la evolución que he logrado”, aseguró con franqueza.
Finalmente, Skandar se tomó unas últimas palabras para dejar su mensaje a quienes recorren el mismo camino que él en la dura disciplina de los paños: “Quiero decirles a todos los jugadores de Colombia que contamos con un gran talento para el poker, con referentes muy importantes, que debemos aprovechar para aprender de ellos. Todo depende de nosotros. Si queremos triunfar en lo que nos gusta, todo está en tener actitud y luchar por los sueños. Aprovecho para agradecer a CodigoPoker por esta oportunidad y por el espacio que me abren. Es algo que me llena de mucha motivación en mi carrera como jugador”, cerró el glorioso campeón del Big $8,80.