Después de jugar el interminable desafío contra VeniVidi1993, la montaña rusa que lo tuvo con 900.000 euros abajo pero que, al cabo, pudo ganar, Phil Galfond tenía en la fila a Bill Perkins , jugador de poker pero, antes, productor de cine y filántropo. Entonces, apenas finalizado el primer #GalfondChallenge comenzó el otro, también un cash de PLO con ciegas en 100/200 dólares con apuestas paralelas.

Perkins (el más alto) y personal de las Islas Vírgenes.

El debut ya vio a Galfond esperando a su rival, mientras hablaba con la gente en partypoker, donde se mudó la partida. Y luego hubo una segunda jornada, en la cual Galfond dio vuelta la historia. Y después…. no más. Se cortó el desafío porque Perkins ya no se presentó, así que el triple ganador de brazalete WSOP se buscó a otro contrincante, Actionfreak, con el que sí mantiene un enfrentamiento regular.

Así son las mácaras que donó.

¿Qué sucedió conPerkins? Se sabe que interrumpió el juego por sus ocupaciones. Pero… ¿cuáles? En medio de esta pandemia, el empresario se juntó con la compañía Brisa Max Holdings VI LLC para buscar recursos y donarlos a las Islas Vírgenes, donde tiene una residencia, yate y todo lo necesario para vivir confortablemente.

Al cabo, el millonario entregó cinco respiradores y 14.000 máscaras respiratorias KN95 (tapabocas para profesionales) al Sistema Hospitalario de las islas pertenecientes a Estados Unidos, que se ubican casi pegadas, al Este de Puerto Rico. El equipamiento fue entregado al Centro Médico Regional Roy Lester Schneider por el propio Perkins.

Claro que antes debió conseguir el permiso de la Administración de Drogas y Alimentos de los EE.UU., que aprobó los materiales para uso hospitalario, vitales para que el personal sanitario reduzca las chances de contagiarse de coronavirus durante el tratamiento de los pacientes afectados.

El Subjefe de Operaciones para el Servicio de Bomberos de las Islas Vírgenes, Eustace Grant, dijo: “En nombre de los hombres y mujeres del Servicio de Bomberos de las Islas Vírgenes, agradezco a Bill y a Brisa Max por la donación de estas máscaras tan necesarias».

Galfond puede esperar. es por un buen motivo…