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Una historia con final feliz, y hasta risueña ahora, comenzó de forma dramática, pero al menos terminó bien. Moisés Candalicio, un hombre de 43 años oriundo de General Mosconi, provincia de Salta , en el norte argentino, era intensamente buscado desde hacía 11 días hasta con perros y bomberos, y cuando ya creyeron que estaba muerto, apareció sano y salvo jugando en un casino de Tartagal, a solo 10 kilómetros de la ciudad mencionada anteriormente.
La denuncia por su desaparición fue recibida por las autoridades el pasado 3 de mayo y generó mucha preocupación en su familia y la comunidad wichí Tres Paraísos, a la que pertenece. Por eso se desplegó un amplio operativo de búsqueda que incluyó rastrillajes, entrevistas y una rápida viralización de su imagen en medios locales.
Incluso se llegó a montar una protesta desde las comunidades originarias de Mosconi hace dos domingos, tres días después de la desaparición de Candalicio, reclamando que se lo buscara, y atendiendo a los dichos de una mujer que afirmó haber visto un cuerpo en la Finca Los Mirkos. Los denunciantes relataron que que el ahora encontrado había ido allí a sacar choclos para buscar algo que comer. La pareja de Moisés hizo la denuncia formal tras reconocer sus pertenencias que habían estado en manos de la mujer que dijo haber visto un cuerpo tirado en la finca.
“Su mujer está asustada porque reconoció las pertenencias en manos de la señora que insiste que ella vio a una persona muerta”, contó Rojas. Esta mujer declaró que al verlo inerte incluso le sacó una bolsa y la honda que llevaba Candalicio. Estas pertenencias fueron reconocidas por su familia como de su propiedad.
Los indicios no eran alentadores…
Sin embargo, Moisés no estaba muerto ni desaparecido, sino pasándola bien con las fichas en la mano…
El hombre wichí fue ubicado en las primeras horas de la tarde de este martes. Tras recibir el aviso de otros miembros de las comunidades indígenas de la zona, la Policía dio con él en un casino. Así lo confirmaron primero la Policía de Salta y luego el cacique de la comunidad Tres Paraísos, Víctor Rojas,quien estuvo al frente de la protesta mencionada.
“Nosotros avisamos al comisario de que estaba en ese lugar”, dijo Rojas al indicar que personas de la comunidad Los Lapachos, en jurisdicción del municipio de Tartagal, afirmaron que habían visto a Candalicio por las calles de esta ciudad y luego en el casino. En declaraciones al canal de noticias Mosconi TV, el comisario Marcos Humano (sí, es así el apellido) afirmó que recibieron un llamado al sistema de emergencia dando cuenta de que habían visto a Candalicio. La Policía fue hasta ese lugar y efectivamente, ahí lo encontraron.
Moisés, luego del revuelo que se armó, realizó declaraciones para el canal Mosconi TV. Dijo que estaba con «otros changos» de Tartagal cuando su cuñado le avisó que «hay problemas allá, que dicen que vos estabas muerto». Asimismo, confirmó -con naturalidad- que no ve a su mujer desde hace una semana.
«No me pasó nada», aseguró Candalicio. Y aclaró que no va siempre a Tartagal, que esta vez fue porque sus amigos le dijeron “falta uno para trabajar” en una changa de cuatro días. «Y los changos vinieron para acá», y él también, sostuvo. Sobre su permanencia en el casino, contó que estaba jugando y hasta «había ganado como cuatro mil» pesos.
O sea: no estaba muerto… estaba de parranda.