Con el final del año cada vez más cerca, Adrián Mateos , uno de los jugadores de poker más destacados de España, tiene su mirada puesta en el WSOP Paradise de Bahamas. Este festival no sólo le ofrece la oportunidad de competir por su quinta pulsera dorada, sino también de sumar puntos cruciales en su pelea por el título de Jugador del Año del Global Poker Index (GPI), donde se enfrenta a Jesse Lonis y David Coleman en una reñida batalla.

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«Estoy muy emocionado por este festival», comentó Mateos a Poker.org. «Este año, los torneos en Bahamas son más grandes, y el invitacional de US$500K será uno de los más importantes. Me encanta jugar en eventos de este nivel, donde todos están motivados y al máximo».

La lucha por el GPI ha sido intensa. Mateos lideró brevemente el ranking en octubre, pero Lonis recuperó la cima tras ganar US$1.5 millones en un evento de Triton. Ahora, Mateos está a solo 62 puntos de la primera posición, en lo que promete ser un cierre de año electrizante.

De los 51 millones de dólares en ganancias en torneos en vivo, 12 de ellos, lo ha ganado en la WSOP, según HendonMob.

Cuando se trata de elegir torneos, Mateos no duda: «Siempre busco los eventos con las apuestas más altas. Este año, el WSOP Paradise es la mejor opción«. Sin embargo, lamenta no poder competir en el EPT de Praga, un circuito que considera excepcional, debido a la coincidencia de fechas.

Como embajador de Winamax, Mateos está a punto de ser el protagonista de nuevos capítulos de En la Mente de un Pro, y su paso por Bahamas de seguro sumará más material para este show telesivo en donde explora su experiencia en los torneos de alto nivel y que es un éxito entre los aficionados.

Tras Bahamas, Mateos planea regresar a Madrid para disfrutar de la Navidad con su familia. Aunque su estilo de vida actual lo aleja de España, admite: «La vida en España es incomparable. Tal vez algún día regrese, pero por ahora, mi prioridad es ser uno de los mejores jugadores del mundo».