Se sabe que nadie tiene asegurado ganar en el casino. De hecho, el porcentaje de veces que «gana la casa» es mayor a la que lo hacen los clientes, sobre todo porque se trata de juegos de azar y no habilidad, como el poker. Ni hablar si nos referimos a las máquinas tragamonedas, en las que solo hay que tener prestancia para tocar un botón o tirar de una palanca. El resto es ver cómo caen las figuras o números y esperar a que la suerte esté de nuestro lado.
¿Perder? Obviamente que está en los cálculos, por lo cual lo ideal sería tener en cuenta esa posibilidad y que se incluya en un buen rato de diversión que pasaremos en medio del ruido de las fichas y demás en un ambiente lúdico. Aunque parece que no todos lo entienden así…
Menos este hombre de 39 años que jugaba en la madrugada a uno de los slots del Casino Central de Mar del Plata 
de avenida Patricio Peralta Ramos 2148 y le aplicó un soberano golpe a la pantalla con la suficiente fuerza como para romperla y dejarla fuera de servicio.
La situación fue advertida por personal de seguridad de la sala de juegos y derivó en intervención de efectivos policiales de Subcomisaría Casino, que lo retiraron del lugar, lo aprehendieron y notificaron el hecho a la Justicia.
El acusado reconoció haber reaccionado porque la fortuna no lo acompañó en la apuesta que había realizado.
La fiscal de Flagrancia María Isabel Sánchez le abrió una causa por daño y dispuso que se lo dejara en libertad dado que se trata de un delito menor y excarcelable, a partir de lo que indica el artículo 161 del Código Penal Procesal.
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