A casi dos meses de que el Congreso aprobara las modificaciones del impuesto a las ganancias, el Gobierno aún no promulgó la creación del denominado impuesto al juego, la forma que decidió la Casa Rosada de financiar la merma en el erario público que generó la reducción del mencionado gravamen.

La falta en la reglamentación es algo que preocupa a los operadores de dicha actividad en todo el país, en especial a los del territorio porteño, quienes fueron los que más fuerza hicieron para evitar que se sancione la ley. La paradoja es que como ese nuevo impuesto no se reglamentó, no se cobra. Por lo que en épocas de cuidado fiscal, el Gobierno ya está con dos meses de pérdida.

El Congreso aprobó la nueva Ley de Ganancias hace dos meses

El problema que denuncian los operadores es la imposibilidad para estimar el margen de ganancias que podrían llegar a tener, como también la incertidumbre sobre la letra chica de la aplicación de la nueva ley. Además, plantean la existencia de una política en su contra, ya que otros sectores que estuvieron involucrados en la negociación para ver de dónde se conseguía el dinero para financiar la quita de Ganancias no fueron tocados, en especial la renta financiera, que por orden del Gobierno, en ese entonces, fue quitada de la ecuación.

Desde el ministerio de Hacienda le dijeron al portal El Intransigente que todavía se encuentran dando los detalles finales a todo lo necesario para la reglamentación y que el motivo de la demora fueron los cambios en dicha cartera, en especial el reemplazo del anterior ministro, Alfonso Prat Gay, y la división en dos (Hacienda y Finanzas por separado).

La semana pasada el presidente Mauricio Macri firmó un decreto, que se publicó en el Boletín Oficial, mediante el cual se le aumentó el canon al Casino Flotante de Puerto Madero, que lo llevó de 20 a 30%, igualando así el que pagan la máquinas tragamonedas del Hipódromo de San Isidro.

Antes de la modificación de Ganancias, la provincia de Buenos Aires, por ejemplo, pensaba en subir la alícuota de Ingresos Brutos al juego del 12% al 19%. Fue una idea del ministro de Economía provincial, Hernán Lacunza, para mejorar las arcas bonaerenses. El aumento en Ingresos Brutos que salió en el presupuesto provincial de 2017 fue de 15%. De esa manera, los bingos bonaerenses enfrentarían una doble imposición: más Ingresos Brutos y el 0,75% de cada apuesta que se haga en sus salas.

El Congreso nacional también estableció que cada persona que ingrese a un bingo o casino pague una entrada de $28. El territorio con mayor cantidad de salas de juego es la provincia de Buenos Aires. Si el impuesto es nacional, los recursos allí generados irán al cofre del Tesoro del Poder Ejecutivo nacional, no al de los bonaerenses. Durante 2016, el juego le aportó más de $27.000 millones al presupuesto que se maneja en La Plata.

Texto: El Intransigente.