Por si quedaba alguna duda, Bin Weng ha logrado llevarse uno de los últimos eventos del año para demostrar la supremacía que ha tenido en las mesas, sobre todo en las del World Poker Tour. Aunque la manera en la que se definió este torneo no se ve todos los días.
El extenso calendario del WPT World Championship 2023 está llegando a su fin en el Wynn de Las Vegas y esta semana se definió el High Roller de buy-in US$25.000. En total se contabilizaron 194 entradas para mostrar un prizepool de US$4.850.000 que se repartió entre los mejores 23 jugadores.
Weng eliminó a seis de siete jugadores en el camino hacia el heads-up, pero el mano a mano duró tanto que él y Thomas Boivin se vieron obligados a parar y decidir el ganador, para el que dejaron un dólar adicional y el trofeo.
Finalmente se jugaron el torneo enun flip y fue el estadounidense quien posó para la foto de campeón con una recompensa US$958.279 gracias a que dio vuelta un par de 8 en manos que le valieron la victoria.
«Estoy un poco sin palabras en este momento, seré honesto. Aunque tengo algunos cobros más altos en 2023, esto es muy diferente. Este es el primero en un High Roller, con una entrada de US$25K. He estado jugando algunos durante los últimos años y nunca había ganado. Es súper duro, hay muchos profesionales duros y significa mucho para mí».
Ahora sólo es cuestión de tiempo para que Weng sea quien también se lleve el reconocimiento en el Player of the Year del GPI gracias a su gran actuación de este año donde ha jugado varios torneos que han ido desde los US$340 hasta este de US$25.000.
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