Inicio > El valor estratégico de la posición en la mesa

Por José el Profe Litvak Flag of Argentina

Cuanto más tarde toca actuar en una ronda hay más información, aumenta el abanico de manos jugables, correlativamente, se reducen las de los oponentes, permite controlar mejor el pozo, se corren menos riesgos con los bluffs y la mayor incertidumbre y pasividad de los ubicados en las primeras posiciones facilitan desarrollar un juego exitoso. Se podrán ganar más manos y maximizar su valor. De allí su importancia.

Es conocida la anécdota de Annette Obrestad, quien ganó un importante torneo online jugando permanentemente con las cartas tapadas (salvo una ronda, para responder una apuesta all in), como entrenamiento y para probar el valor estratégico de la posición.

Doyle Brunson dijo alguna vez: “si pudiera jugar con posición durante toda una sesión, ganaría cualquier juego, sin necesidad de mirar mis cartas”. La afirmación puede parecer exagerada, pero da una idea de la importancia que se le otorga. Como en cada sesión estaremos también en las “malas” posiciones. Lo más inteligente, en esas circunstancias, es entrar en juego en menos oportunidades: menos riesgos y menos complicaciones son directamente proporcionales a mayor stack.

doyle-brunson1.jpg

Doyle Brunson

Los beneficios de la posición se verificarán según cómo aprovechamos de ésta. De nada vale ser el button, si no exprimimos esa ventaja. Por el contrario, las “malas” pueden convertirse en “buenas” a partir de iniciativas controladas.

Veamos un ejemplo: supongamos que estamos en la big blind de $ 10, y nuestra mano es J 10. Dos o tres jugadores pagan, el button sube a $ 40 y la ciega chica foldea. Es nuestro turno y debemos decidir la jugada. Nuestras cartas no son premium, pero son “interesantes”, están conectadas y en suite con posibles draws a escalera y/o a color y de considerable valor. Además, es común que desde esa posición se haga ese raise (para robar), por lo que decidimos pagar. En la próxima etapa, seremos los peor ubicados, los primeros en “hablar”.

Si el flop fuera totalmente favorable, apostaremos o haremos un check raise o, si son muy buenas, hasta un check call, para seguir dándole valor al pozo. Pero, si no conectamos, ¿qué actitud tomamos? Aquí es donde aparece la inquietud del planteo. Si checkeamos (lo que haría la mayoría) le damos el control del juego al button; si él apuesta, deberemos foldear, irremediablemente, aunque tampoco tuviera juego. En cambio, si tomamos la iniciativa y apostamos nosotros, invertimos las ventajas de la posición y es él, ahora, el que debe decidir. Si no conectó en el flop, (lo más probable) o no tiene un par alto en la mano, seguramente foldeará.

Es claro que esta apuesta conlleva su riesgo. Si su primer raise fue genuino o si conectó, habremos perdido más fichas que con un simple check. La decisión de hacerlo o no dependerá, entre otros condicionamientos, de la textura del flop. Si éste trae cartas altas, será más peligroso y, si son bajas y no conectadas, menos.

Ya hemos tenido –y seguramente tendremos en sucesivos artículos- la ocasión de analizar jugadas y niveles de apuestas. Pero ahora, destacamos de qué manera una acción ofensiva puede cambiar las desventajas posicionales.

Como efecto adicional, esta jugada puede brindar “cartas gratis” y más información. Veamos:

En el ejemplo anterior, si después de ver el flop ninguno de los dos tuviera buen juego y checkeamos, si él presume que nuestra verdadera acción es un check raise, probablemente, también pase. Como no tiene cómo defenderse, preferirá no arriesgar y ambos veremos “gratis” el turn. Su check nos revela, adicionalmente, que no tiene juego pues, de lo contrario, habría hecho alguna apuesta de valor y no nos habría dejado ver la cuarta carta sin costo.

Otro ejemplo de modificación de las ventajas posicionales nos lo explica Arnold Snyder: “Si estás en una de las ciegas, y alguien raisea desde posiciones tardías, paga. Casi seguro es un raise posicional, que no implica un buen juego. Cuando veas el flop, apuesta, sin importar qué cartas tengas en mano. No puedes hacerle este bluff a cualquiera o en todos sus intentos de robo. Tendrás que dejarlo robar un par de veces tus ciegas, en tanto no tengas una buena mano. Lo que te propones es hacerle creer que sólo pagas con buenas manos y que no piense que quieres defender tus ciegas. No temas que su raise se deba a que tiene una buena mano. Si no mete un top pair o algo mejor en el flop, foldeará. Inclusive, puede haber hecho un raise con QQ, pero si en el flop hay un A o un K y haces una apuesta de continuación después de haber pagado su subida preflop, el pozo será tuyo. Lo más interesante de este bluff es que podrás impedir que te roben futuras ciegas (sentarás un precedente). La rentabilidad de la jugada se debe a que él solo se llevará tu ciega, pero, con tu contraataque, puedes llevarte tu ciega más su raise” (conferencia Poker Tournament Formula)».

Jugar fuera de posición disminuye la potencia, y una mano débil desmejora aún más, mientras que, en posición, se fortalece. Tomar la iniciativa puede modificar esa ventaja. Habrá que medir bien en qué circunstancias conviene apostar fuera de posición y en cuáles esperar la oportunidad adecuada.

Supongamos otra situación, la que plantea Phil Gordon: “Cuando alguien raisea y todos foldean, he descubierto que, estando en posición tardía, es rentable pagar con una amplia variedad de manos. Quiero que mi oponente se sienta a disgusto. Cuando hago esta jugada, es más factible que pague con 8 6 que con A 6. Pagar con este segundo juego no es rentable, lo que quedará demostrado si ambos metemos el par alto, pero mi kicker es bajo contra el de mi oponente. Sin embargo, es razonable pensar que él no tenga 8 6 y, salvo que en la mano tenga un par más alto que mi 8, estoy en buen camino. Tres buenas posibilidades pueden pasarme en esta situación: A)Mi oponente puede no ligar en el flop, chequear y, cuando yo apuesto, me llevo el pozo. B) Puedo conectar un buen flop y hacer que mis posibilidades crezcan. c) Una de cada 30 oportunidades, puedo meter par doble o algo mejor en el flop (Conferencia Little Green Book).

En algunas salas online, hay una buena herramienta para controlar cuán “bien o mal” estamos jugando desde el punto de vista estratégico (y, en eso, la posición es un elemento gravitante). Es una estadística que brinda el software de las mismas: el promedio de “non showdown winnings”; es la cantidad de manos que se ganan sin llegar a mostrar los naipes. Este cómputo muestra cuántas veces ganamos por apostar bien y no por tener el mejor juego. Cuánto ganamos por buena estrategia y por acomodarnos a las condiciones posicionales, y no por el valor de nuestras cartas.

Todo lo dicho es meramente introductorio y ejemplificativo de la importancia del juego posicional. Este es uno de los tantos parámetros a tener en cuenta pero, como hemos visto, relevante.

……..

Si te interesó este tema y quieres seguir aprendiendo más sobre poker, te invitamos a que ingreses en nuestra en Tienda Online de CodigoPoker. En ella encontrarás una amplia variedad de productos, entre ellos, textos educativos. Pincha en el siguiente banner y estarás un paso más cerca de aumentar tus conocimientos sobre nuestra querida disciplina.

¿Quieres enterarte primero de todo lo que sucede en el mundo del poker? CodigoPoker te brinda la mejor información minuto a minuto en tu social media. Síguenos en X, Facebook, Instagram, Youtube o Twitch

Notas relacionadas

Noticias TOP 3