Al momento de la suspensión del primer torneo de la MSOP Riviera Maya, Ibrahim Nasief estaba poniendo en juego su segunda bala después de un paso en falso al inicio. Entre los 26 jugadores que habían pagado su entrada, se encontraba el «cubano», quien quería cambiar las cosas que hasta el momento no venían saliendo bien. Sin embargo, no pudo ser…

«Nos agarró a todos por sorpresa. Nadie sabía lo que estaba pasando», recuerda el Team Pro de la MSOP. «El sentimiento general era que se pasaba rápido. Sentíamos que había esperanza. Más allá de que estuvieran ganando o perdiendo, todos se la estaban pasando muy bien. Era algo muy padre poder ver a jugadores de otros países compartiendo la mesa».

Es que el Super High Roller hacía de antesala a lo que iba a suceder más adelante: el Evento Principal, que prometía 10 millones de pesos. De todos modos, nada de eso llegó a concretarse. » Ver a gente que yo había invitado en torneos de Panamá, y que llegó hasta aquí para luego toparse con que gobernación iba a parar el torneo, la verdad que me pareció muy injusto», reclama Ibrahim.

Luego, continúa con un tono de desánimo: «La verdad es que estoy un poco decepcionado porque iba a hacer un evento que cambiaría el aspecto general del poker en México. Se iba a convertir en la pauta general a seguir acá. Que se haya cancelado por una estupidez, en la que alguien se pasó los permisos por cualquier parte, no me parece justo para nadie».

Nasief es uno de los jugadores mexicanos que más se ha destacado en el plano local en los últimos tiempos.

Sobre todo cuando un ente regido por el Gobierno Nacional se crea en pos de que este deporte sea considerado como tal. Aunque hay una realidad en la que el poker en este país solamente puede ser jugado en las ferias según apunta el artículo 63 de la Ley Federal de Juegos y Sorteos. No obstante, la Asociación Deportiva Nacional apunta a que esta reglamentación, que rige desde 1947, se quede en el pasado y este juego trascienda. «Creo que no será un camino fácil», sostiene Nasief. «Sobre todo después de algo así. Sin embargo, por lo que escuché, el sentimiento general era como que los jugadores tenían muchas ganas de ver algo así en México. Sinceramente noté mucha confianza en la marca, algo que a veces se pierde después de situaciones así».

«La función de ADN – se extiende – es tratar de quitar el mito de que el poker es un juego de azar y se juega en salones de atrás. Lo que quiere es demostrar que es un deporte. No es lo mismo un jugador novato que un experimentado. De todas maneras, si para nosotros es difícil explicarlo, cuando nos preguntan a qué nos dedicamos, imagínense a escala masiva como lo quiere demostrar esta institución».

El potencial de México en esta materia

«Mientras más rápido podamos resolver este problema, para nosotros será mejor», dice Ibrahim. «No sabemos qué puede llegar a pasar en un torneo que hoy garantiza 10 millones. A lo mejor, en unos años, podemos tener un millón de dólares asegurados, tal vez dos. Aquí en México tenemos mucho para dar y eso puede ser probable. Haciendo un evento en la Riviera Maya, dime a cuántos profesionales no les gustaría estar aquí. Si los jugadores van a Bahamas, aquí es prácticamente lo mismo, con la diferencia que es más barato. Los hoteles son lo mismo, y más accesible, las playas más lindas o mejores. Eso es algo que no tiene competencia y lo queremos explotar. Pero para eso, necesitamos más y más gente».

La ilusión está en Querétaro

En una de las ciudades del centro del país se realizará la segunda fecha de la Mexican Series Of Poker, que se disputará desde el 16 al 22 de julio. Sobre esta parada, Nasief apunta a que se pueda llevar a cabo de la mejor manera: «En esta primera fecha tenía mucha ilusión por todo lo que se había generado. Tengo la esperanza que Querétaro sea un gran torneo. Esperamos que podamos recuperar la confianza de los jugadores, porque aquí se montó bien. Desde los dealers, hasta el equipo de directores y el salón».