Por José el Profe Litvak
En las últimas etapas, miraremos más a menudo los monitores para comparar nuestro stack con el promedio. Los tiempos se acortan, las ciegas aprietan y la dispersión de fichas es tan elevada como nuestra ansiedad. En estas circunstancias ¿cuándo podemos decir que nuestra pila es escasa, suficiente u holgada? No hay parámetros definidos, no podría haberlos, hay opiniones.
En general, hay cierta coincidencia en categorizar como chico a menos de la mitad del promedio y como grande cuando llega a una vez y media, pero, como veremos, esta opinión es elemental. En términos estratégicos, en una mesa final, se puede decir que un stack de 100 bb es tan grande como uno de 120 bb. Sin embargo, y pese a que se trata de la misma diferencia, no es lo mismo tener 10 bb que 30 bb.
Marchese, ganador de cuatro 25k HR y un 100k SHR del Aria Casino en el último año y medio.
Tom Marchese considera que, en las finales de un torneo, el tamaño más difícil de jugar “es el que nos dificulta foldear luego de haber hecho 3 bet y el que, al mismo tiempo, es demasiado grande para hacer una resubida all in sobre un raise; diría que ronda entre 23 y 27 ciegas grandes”. Y agrega, “cuando decido jugarme con una mano, trato de considerar mis acciones previas en la mesa y cómo me ven mis oponentes. “Un ejemplo genérico sería que no hayamos 3beteado y tenemos A A con 30 ciegas grandes. En este caso, lo mejor sería sólo pagar una subida. Si hubiésemos estado resubiendo mucho, lo mejor sería raisear y rezar que el rival haga un bluff all in”.
“Otra cosa a considerar es el rango de manos preflop de nuestro oponente”, continúa Marchese. “Contra uno amplio debemos tenderle una trampa con una mano grande, mientras que si tiene una más fuerte no hay motivo para jugar lento, ya que él nunca va a poder foldear contra nuestros A A“.
Lichtenberger, recientemente finalista del WSOPE ME.
Andrew Lichtenberger coincide. Dice: “un stack de 20 – 30 ciegas es siempre difícil de maniobrar, ya que, si subimos con muchas manos, los buenos jugadores se van a dar cuenta y van a 3betearnos. Cuando estamos en posición tardía, se dan muchas decisiones interesantes con manos que, generalmente, son jugables, pero se torna confuso cuando es improbable que sólo nos paguen».
Al respecto, el mismo jugador ejemplifica: «cuando aumentamos contra short stacks o cuando nosotros estamos short, es poco probable que sólo nos paguen y muy probable que ganemos las ciegas o que nos resuban all in. Para maximizar nuestro EV en estas situaciones, debemos seleccionar con cuidado qué manos vamos a aumentar y tener la disciplina suficiente para poder foldear algunas que normalmente son fuertes si creemos que nos van a resubir”.
Madsen ganó un brazalete y alcanzó otro podio en la última WSOP.
Finalmente, Jeff Madsen opina que el único tamaño de stack raro de jugar en estas instancias finales es el short que tiene un caudal de fichas insuficiente que no le impide tener que ir all in: “Con 15 – 25 bb las decisiones dejan de ser claras, porque tenemos más opciones”. Y pone un ejemplo: “tenemos A A en posición media con 16bb. tienen posición sobre nosotros, a veces haremos una subida estándar de 2,5bb y otras iremos all in”.
Ante esta situación expuesta, Madsen analiza: “Debemos tener cuidado de no facilitarle la lectura de la mano, así que no tenemos que hacer siempre lo mismo con una mano fuerte. Si alguien resube, me parece bien ir all in, pero sólo pagarle puede ser más efectivo para sacarle valor luego, particularmente si el que resubió parece no tener una buena mano y suponemos que foldearía si nos jugamos».
Sobre el rango de manos, estando short y en una mesa final, el ganador de dos brazaletes WSOP en su primer experiencia con el mínimo de edad permitido, concluye: “Es difícil tomar decisiones con manos marginales como 5 5 o A 10 con stacks de este tipo cuando el rival nos aumenta. Si tenemos, por ejemplo, 21 ciegas, no vamos a querer demasiadas fichas todavía, a menos que tengamos una muy buena lectura. Así que, a veces, sólo pagar puede ser la opción aconsejable para ver qué hace el oponente en el flop y, a veces, foldear puede ser lo mejor cuando creemos que él tiene una buena mano. Este tipo de stack es el más complicado por las dificultades para jugar manos fuertes y marginales, y lo crucial de cada decisión para obtener la reacción óptima de los oponentes”.
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