Un mismo jugador eliminó a Hellmuth padre e hijo
El hecho histórico quedará grabado en el anecdotario de John Riordan, cuya hazaña se dio en el PGT Kickoff de Las Vegas.
El cerco a las apuestas online se está extendiendo por América Latina. En junio dábamos cuenta al bloqueo de sitios en Uruguay, algo que luego sucedió en Argentina. En este país, hace unos días, se conoció el pedido de regulación y gravado de la actividad y ahora la noticia salta en Perú. Las cuentas no dan y los gobiermos pretenden abrir este grifo para que de él fluya dinero…
Según publica hiperderecho.org, la congresista Leyla Chihuán busca que las empresas que ofrecen servicios de apuesta y juegos de azar por Internet tramiten una licencia y paguen impuestos en el país. De no hacerlo, sus sitios web y plataformas serían bloqueados para Perú y sus usuarios podrían perder el acceso a sus cuentas y al dinero que hayan depositado o depositen en el futuro.
Además, el proyecto que impulsa la ex capitana de la selección de vóleibol inca, exige que las empresas que quieran ofrecer juegos de apuestas por Internet a personas que viven en Perú tramiten una licencia de juego ante la Dirección General de Juegos de Casino y Máquinas Tragamonedas (DGJCMT) del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo.
Del mismo modo, se crea la obligación de registro para proveedores como comercializadores de software, pasarelas de pagos, aplicaciones, entre otros, que ofrezcan sus servicios a empresas de juegos de azar. En el caso de los usuarios peruanos, éstos deberán de registrarse al crearse una cuenta y tienen prohibido participar de apuestas en sitios o plataformas que no han obtenido una licencia de juego en el país.
El Proyecto de Ley establece que obtener la licencia es un requisito obligatorio, no importa si ya tienen licencias otorgadas por otros países. A los que decidan no licenciarse en el Perú, les esperan dos cosas: sus sitios y plataformas serán bloqueados en Internet pues su actividad será considerada ilegal; y cualquier actividad como facilitar, promover, hacer publicidad o incluso participar en algunos de estos sitios podría convertirse en un delito sancionado hasta con cuatro años de prisión. Además, actividades relacionadas como publicitar un sitio de apuestas será considerada delito.